Además de las clasificaciones a prueba de explosiones, las luces LED a prueba de explosiones también se clasifican por sus capacidades anticorrosión. Las designaciones a prueba de explosiones generalmente se dividen en dos categorías: IIB e IIC. La mayoría de las luces LED cumplen la norma IIC, que es más estricta.
En cuanto a la anticorrosión, las clasificaciones se bifurcan en dos niveles para ambientes interiores y tres niveles para exteriores. Los niveles anticorrosión para interiores incluyen F1 para resistencia moderada y F2 para resistencia alta. Para exteriores, las clasificaciones son W para resistencia ligera a la corrosión, WF1 para moderada y WF2 para alta resistencia a la corrosión.
Esta clasificación detallada garantiza que las luminarias se adapten a las condiciones ambientales específicas, mejorando tanto la seguridad como la longevidad.