Una luz a prueba de explosiones puede iluminarse sin un cable de tierra, pero esta configuración no cumple las normas de conexión a tierra exigidas para los equipos eléctricos a prueba de explosiones.
Para garantizar la seguridad, en la carcasa de la luz antideflagrante hay una conexión de tierra de protección (PE). En caso de fuga, la corriente se desvía a través de esta línea hacia la tierra, funcionando como un cable neutro y proporcionando un enlace directo a la luz.