La Agencia de Protección del Medio Ambiente de Estados Unidos (EPA) está llevando a cabo una investigación sobre la relación entre el butadieno y el cáncer.
Además, la EPA ha formulado un proyecto de plan para regular la dispersión de benceno, identificado como carcinógeno. La agencia afirma que existen datos sustanciales que demuestran que el butadieno, junto con su proceso de fabricación de caucho sintético, pone en grave peligro la salud humana.