En circunstancias normales, tanto los equipos eléctricos como los no eléctricos instalados en zonas potencialmente explosivas requieren una certificación antideflagrante.
Si tiene alguna duda, es aconsejable consultar a los organismos de certificación. Conocen bien las normas de certificación a prueba de explosiones y los requisitos técnicos, y pueden ofrecer a los clientes un servicio integral que abarque el diseño a prueba de explosiones, la rectificación, las pruebas y la certificación.