Las cajas de distribución a prueba de explosiones son una preocupación fundamental para muchos, y sus precios varían debido a varios factores. Entender estos factores puede dar una idea más clara de los precios.
1. Especificación:
El tamaño de la caja de distribución desempeña un papel importante en su precio. Generalmente, Las cajas más grandes del mismo material suelen ser más caras.
2. Nivel a prueba de explosiones:
La clasificación a prueba de explosiones se basa en los tipos de gases explosivos presentes. Los niveles más comunes son Exde II BT6 y Exde II CT6. Para entornos con gases como hidrógeno, gas de hulla, acetileno, disulfuro de carbono o nitrato de etilo, se requiere el nivel Exde II C. Los gases menos peligrosos pueden requerir una caja de nivel Exde II B.
3. Marca:
Las distintas marcas utilizan componentes internos, tecnologías de fabricación y equipos de calidad variable. Esto se traduce en importantes diferencias de costes. Por tanto, la elección de la marca puede afectar sustancialmente al precio.
4. Material:
El material de la caja antideflagrante es otro factor que influye. Los materiales más comunes son la aleación de aluminio, el acero al carbono y el acero inoxidable. Dado que estos materiales tienen distintos costes de base, influyen en el precio final de la caja, con materiales más caros que dan lugar a productos más caros.
5. 5. Calidad:
Aquí se aplica el adagio "obtienes lo que pagas". Por lo general, las cajas de mayor calidad tienen precios más altos. Sin embargo, debido a la intensa competencia del mercado, algunos vendedores sin escrúpulos pueden ofrecer productos de calidad inferior a precios más altos, lo que exige discernimiento en las decisiones de compra.
El precio de una caja de distribución antideflagrante viene determinado por factores como el tamaño, el nivel de antideflagración, la marca de los componentes internos y el material de la caja. Para obtener un precio exacto, es esencial contar con especificaciones y planos detallados.