Es bien sabido que las condiciones del entorno de trabajo de los equipos eléctricos son cruciales para su uso seguro, siendo la temperatura ambiente un factor importante para su funcionamiento seguro. Sin embargo, todo aparato eléctrico debe tener una temperatura ambiente de funcionamiento especificada. En cuanto a los equipos eléctricos a prueba de explosiones, la norma nacional GB3836.1 "Aparatos eléctricos para atmósferas de gas explosivo Parte 1. Requisitos generales": Requisitos generales". estipula una temperatura de funcionamiento de -20 a +40°C.
Si la temperatura ambiente de funcionamiento de equipos eléctricos antideflagrantes supera este rango especificado, los fabricantes deben indicar con precisión este rango de temperatura en la placa de características del producto. Además, esta información debe indicarse claramente en la documentación pertinente para el usuario, como el manual de instrucciones.
Es importante tener en cuenta que cuando los diseñadores establecen determinadas especificaciones de rendimiento para un producto, tienen en cuenta las condiciones ambientales de funcionamiento reales. Si el entorno de funcionamiento real difiere del entorno diseñado, es posible que el producto no alcance sus especificaciones de rendimiento y podría resultar gravemente dañado. Los operadores deben tener en cuenta que, en el caso de los equipos eléctricos a prueba de explosiones, el funcionamiento a temperaturas superiores a las especificadas puede afectar a algunas de las funciones de seguridad a prueba de explosiones.