Un soplete de oxicorte puede producir temperaturas de llama de entre 3100 y 3150°C.
Este calor intenso se emplea para cortar el metal mediante una llama proyectada desde un soplete de oxiacetileno.
Un soplete de oxicorte puede producir temperaturas de llama de entre 3100 y 3150°C.
Este calor intenso se emplea para cortar el metal mediante una llama proyectada desde un soplete de oxiacetileno.