La decisión de aumentar los cables con conductos externos no afecta a las medidas de seguridad antideflagrantes del emplazamiento. En las zonas designadas a prueba de explosiones, la norma es utilizar cables blindados, lo que evita la necesidad de conductos adicionales.
El aspecto crítico es garantizar el sellado hermético en el punto donde los cables se conectan a las cajas de conexiones, empleando prensaestopas a prueba de explosiones. Una norma clave que hay que cumplir es pasar un solo cable por cada prensaestopas, evitando el paso de varios cables por un mismo punto. En cuanto a los cables externos, no es necesario añadir conductos siempre que su cubierta exterior no sufra daños.