Las cajas de distribución antideflagrantes y las cajas de control, aunque distintas, tienen funciones que se solapan, y cada una hace hincapié en aspectos diferentes.
Caja de distribución a prueba de explosiones
La función principal de una caja de distribución a prueba de explosiones es en distribución de energía, suministro, iluminación, protección contra explosiones, conmutación y protección de dispositivos eléctricos. Permite la apertura o cierre manual o automático de circuitos durante el funcionamiento. En caso de fallos o averías, puede cortar circuitos o activar alarmas mediante dispositivos de protección, ofreciendo protección contra sobrecargas, cortocircuitos y fugas. Sirve tanto de entrada para las líneas de alimentación como de salida para el suministro eléctrico. Centradas principalmente en la distribución de energía, las cajas de distribución a prueba de explosiones con funciones de control también se conocen como cajas de control a prueba de explosiones.
Caja de control a prueba de explosiones
La caja de control antideflagrante suele servir como un dispositivo de control y enclavamiento para equipos eléctricos terminales, que envía o transfiere órdenes de control para diversos dispositivos. Estas cajas de control tienen múltiples funciones y pueden incluir capacidades de distribución. Adecuadas para diversos entornos de gases y polvos inflamables y explosivos, se utilizan para controlar bombas contra incendios, bombas de aceite, ventiladores contra incendios, ventiladores, iluminación y maquinaria diversa, como máquinas de temperatura de moldes y enfriadores. Ofrecen varios métodos de control, como el control de arranque directo, el control de arranque de tensión reducida estrella-triángulo, el control de arranque de tensión reducida con acoplamiento automático, el control de arranque con convertidor de frecuencia y el control de arranque suave, entre otros.