Para ayudarle a seleccionar los dispositivos eléctricos antideflagrantes adecuados, hoy destacamos las diferencias entre las cajas de conexiones antideflagrantes y las cajas de conductos antideflagrantes. Aunque ambas son componentes clave en los sistemas eléctricos a prueba de explosiones, difieren significativamente en función y características, a pesar de sus nombres similares.
Cajas de conexiones a prueba de explosiones:
Empezando por las cajas de conexiones antideflagrantes, estos dispositivos sirven como puntos de conexión entre la distribución de energía, los equipos eléctricos y el cableado externo. Desempeñan un papel crucial en la protección de las líneas, alojan regletas de bornes o terminales de conexión con aparamenta. Normalmente, estos dispositivos están diseñados para ser desmontables para facilitar el mantenimiento y la configuración.
Cajas de derivación a prueba de explosiones:
En cuanto a las cajas de conductos antideflagrantes, se utilizan cuando la longitud de un conducto supera ciertos límites, o cuando hay desviaciones o curvas excesivas en el recorrido del cableado. En estos casos, Añadir una caja de derivación en puntos estratégicos facilita el enhebrado y la gestión de los cables. Estas cajas cubren las lagunas en las distribuciones de cableado complejas.
Tanto las cajas de derivación como las de empalme están fabricadas en fundición de aleación de aluminio sin cobre con una superficie recubierta de polvo resistente a la corrosión. Cumplen las normas antideflagrantes necesarias, lo que garantiza la seguridad en entornos peligrosos.