Definición:
Como su nombre indica, la función principal de una bombilla antideflagrante es evitar que estalle. Las bombillas normales tienden a calentarse después de estar encendidas durante un tiempo y pueden reventar fácilmente si no se manipulan con cuidado. Sin embargo, las lámparas antideflagrantes, que a menudo utilizan tubos LED, no presentan este problema de calentamiento, lo que reduce significativamente el riesgo de explosión. Por lo tanto, en zonas con altos requisitos de prevención de explosiones e incendios, el uso de luces antideflagrantes es esencial para garantizar la seguridad.
Ámbito de aplicación:
Las luces a prueba de explosiones se utilizan principalmente en lugares peligrosos con gases combustibles y polvo. Evitan la ignición de los gases y polvos inflamables circundantes por arcos internos, chispas y altas temperaturas, cumpliendo así los requisitos de antideflagración. También se denominan luminarias antideflagrantes o iluminación antideflagrante. Las diferentes mezclas de gases combustibles tienen diferentes requisitos para el grado a prueba de explosiones y el tipo de luz a prueba de explosiones. Consulte específicamente las normas GB3836 e IEC60079.
Apto para entornos con gases explosivos de las zonas 1 y 2;
Apto para entornos con gases explosivos de nivel IIA, IIB, IIC;
Adecuado para entornos de polvo combustible 20, 21 y 22;
Apto para entornos con grupos de temperatura de T1 a T6.
Funcionalidad:
Al ser la luminaria más utilizada, la tecnología de la luz a prueba de explosiones ha acaparado durante mucho tiempo una gran atención e importancia. Con una carcasa de aleación de aluminio y una superficie de plástico pulverizado, está diseñada tanto para iluminación como para emergencias.
Alberga baterías de níquel-cadmio libres de mantenimiento, que se cargan automáticamente en condiciones normales de suministro eléctrico y se iluminan automáticamente durante cortes de corriente o emergencias; está diseñada para el cableado de tuberías de acero. En las luces de emergencia especializadas, la iluminación normal y la iluminación de emergencia son independientes; iluminación de doble propósito para situaciones normales y de emergencia, compartiendo un cuerpo de luz pero fuentes de luz independientes.
La luz a prueba de explosiones, a través de un diseño único de distribución de la luz, controla con precisión el patrón de luz y el ángulo de emisión de la fuente LED, evitando la contaminación lumínica y la utilización ineficaz de la luz. La luz es suave y no deslumbra, lo que evita la fatiga ocular de los operarios y mejora la eficiencia del trabajo.
También puede equiparse con tubos fluorescentes T5 de renombre internacional a petición del cliente, que ofrecen una gran eficacia luminosa y se adaptan a las condiciones de iluminación reales, ahorrando unos 30% de energía en comparación con los tubos T8. También puede equiparse con un dispositivo de emergencia a petición del usuario. Ligera e integrada en el cuerpo de la luminaria, la lámpara pasa automáticamente al modo de iluminación de emergencia cuando se corta la alimentación externa.
Lo anterior detalla las funciones de las luces antideflagrantes. A la hora de comprar, es aconsejable acudir a un mercado local de materiales de construcción de confianza para asegurarse de la calidad de las luces.