¡Claro que sí!
El xileno es un disolvente químico perteneciente a la categoría de los hidrocarburos aromáticos. El gasóleo, por su parte, es un compuesto de alcanos, olefinas, cicloalcanos, aromáticos y aromáticos policíclicos.
Son totalmente compatibles y pueden mezclarse en cualquier proporción sin problemas.